APRETAR Y RECHINAR LOS DIENTES

Bruxismo


Un problema común que afecta al 80% de la población. El rechinar los dientes y apretar la mandíbula puede causar desgaste de los dientes, roturas, dolor, movimiento limitado de la articulación de la mandíbula (trastorno de la articulación temporomandibular), migrañas y dolores de cabeza. Más común en adultos mayores de 25 años, la causa no se comprende completamente, aunque los síntomas a menudo empeoran durante los períodos estresantes.

 
Efectos del bruxismo

Los enfermos de bruxismo se ven afectados de muchas maneras y puede conducir a problemas más graves, que a menudo requieren la intervención de un dentista.

Muchos síntomas, sin embargo, es poco probable que estén relacionados con la odontología; a menudo el bruxismo no se trata durante muchos años. Es común que los pacientes recurran a su médico de cabecera y tengan una gran cantidad de investigaciones para otras afecciones médicas, incluidas resonancias magnéticas y escáneres cerebrales.

Efectos a corto plazo del bruxismo

  • Dolores de cabeza y migrañas
  • Mialgia facial (dolor de mandíbula y músculos faciales, a menudo diagnosticados como dolor facial atípico)
  • Dolor de oído, tinnitus y dolores sinusales.
  • Rigidez en el cuello y los hombros
  • Apertura limitada de la boca.
  • Mala calidad del sueño 
  • Trastornos del sueño del compañero de cama debido al ruido.
  • Movilidad dental y desgaste dental.
  • Cúspides de dientes fracturados y empastes rotos 
  • Retroceso e inflamación de las encías.
  • Vieira de lengua

Efectos a largo plazo del bruxismo
  • Migrañas no tratadas prolongadas
  • Tono muscular facial excesivo
  • Trastorno de la articulación temporomandibular (a veces llamado TMJD o simplemente TMJ) 
  • Hacer clic o hacer estallar la articulación de la mandíbula
  • Desgaste y pérdida de dientes

Tratamientos para el bruxismo

Hay muchas formas de controlar el bruxismo, el tratamiento más común son las férulas oclusales (aparatos dentales). Hay otras terapias y tratamientos disponibles, pero estos generalmente se consideran menos efectivos. Cada vez es más popular para los dentistas recomendar un plan de tratamiento más holístico. Esto puede incluir tratamientos combinados con fisioterapeutas, quiroprácticos y, a veces, hipnoterapeutas.
 
Las férulas oclusales generalmente están diseñadas para actuar como una separación mecánica de los dientes y pueden ser tan simples como un protector bucal suave. También se pueden considerar otros tratamientos dentales, como el equilibrio (rectificado de la superficie del diente para que los dientes encajen mejor), ortodoncia o coronas y carillas.

Tipos más comunes de férulas dentales

  • SCi: férula pequeña que se ajusta sobre los dientes frontales

  • Protectores bucales blandos, a menudo llamados 'dispositivos para levantar mordidas'
  • Férulas de estabilización de Michigan o Tanner - férulas de arco completo
  • Guardias de noche

Otras terapias que se usan para los síntomas del bruxismo
  • Fisioterapia
  • Hipnoterapia
  • Antidepresivos 
  • Restauraciones: coronas, puentes y chapas

SCi (NTI-tss)

SCi: el inhibidor del apretón del sueño (anteriormente conocido como NTI-tss) es el tratamiento clínicamente más efectivo aprobado por la FDA para TMD, bruxismo y migrañas con diagnóstico médico.

¿Cómo funciona el SCi?

El SCi reduce la intensidad anormal o parafuncional de los  músculos temporales,  domina los  músculos y, en cierta medida, los pterigoideos laterales  (los músculos pequeños en las articulaciones de la mandíbula que abren la mandíbula). Esto elimina el contacto de los dientes posteriores y caninos, lo que reduce la contracción del músculo temporal. 

Inténtalo tú mismo

Tome un lápiz y colóquelo entre sus molares o caninos. Con las manos, siente el bulto del músculo temporal en el área de la sien. Luego transfiere el lápiz entre tus incisivos y presiona el temporal en el mismo lugar en tus sienes nuevamente: ¿sientes la diferencia? ¡Los estudios demuestran que la posible intensidad de contracción del músculo temporal cuando solo los incisivos entran en contacto se reduce en un promedio del 70%!

Dolores de cabeza y migrañas

El bruxismo (rechinar los dientes y apretar los dientes) tiene muchos efectos en la víctima, más comúnmente: desgaste dental y dientes rotos. Uno de los efectos más debilitantes del bruxismo son los dolores de cabeza, las migrañas y los dolores de cabeza por tensión crónica. Estos síntomas a menudo no se tratan porque ¿quién pensaría que es causado por el rechinar o apretar los dientes? La gravedad de los dolores de cabeza se puede evaluar utilizando el cuestionario HIT6 . Usando una serie de seis preguntas simples, se puede monitorear el nivel de gravedad.

Durante el sueño todos hacemos cosas extrañas, como roncar, patear nuestras piernas e incluso hablar. Pero una de las cosas más comunes que hacemos en algún momento de nuestras vidas es rechinar los dientes. Para muchas personas, esto no se reconoce. Algunas personas pueden notar que sus dientes se están desgastando o rompiendo, pero para los desafortunados, sufren dolores de cabeza y migrañas.

¿Alguna vez se preguntó qué tienen en común estos síntomas que hacen que su vida sea miserable?

Todos ellos son controlados y/o moderados por el sistema nervioso trigémino. Cuando los músculos comienzan a apretar la mandíbula y rechinar los dientes, el sistema nervioso trigenminal se bombardea con señales. Si el sistema se ve comprometido, entonces no puede manejar las señales y se malinterpreta. Esto resulta en un estímulo nocivo para el líquido que rodea el cerebro, lo que resulta en un fuerte dolor de cabeza o migraña.

Ahora sabemos que muchos síntomas pueden estar relacionados con esta entrada nociva y nuestra comprensión del nervio trigémino, y cómo los síntomas se relacionan con un paciente de migraña.


El nervio trigémino tiene dos divisiones:

  1. Raíz motora, que envía impulsos nerviosos a los músculos de la mandíbula para hacerlos contraer; la división sensorial, mucho más masiva (formada por los nervios que traen información de la periferia).
  1. La división sensorial se divide en tres segmentos distintos de recepción sensorial (de ahí el término trigémino):
Primera división: Oftálmica: recibe información sensorial de las arterias que rodean el cerebro alrededor y detrás de los ojos

Segunda división: Maxilar: recibe información sensorial desde debajo de los ojos hasta la mandíbula superior.

Tercera división: Mandibular: recibe información sensorial para toda la mandíbula inferior.
Las tres divisiones alimentan el núcleo sensorial trigémino.

La comprensión actual de la naturaleza de la migraña es que resulta de un trastorno de "modulación sensorial", lo que significa que la información recibida por el Núcleo Sensorial se malinterpreta, lo que resulta en una respuesta desproporcionada o una respuesta totalmente inapropiada. 

Por ejemplo, durante un ataque de migraña, los simples cambios de presión del líquido que rodea el cerebro (como resultado de los latidos del corazón), se perciben como "golpes".

El objetivo terapéutico en la prevención de la migraña es limitar la cantidad de sustancias nocivas. entrada sensorial (es decir, para limitar sus "desencadenantes" de migraña) al Núcleo sensorial trigémino. La forma en que podemos hacer esto es reduciendo la intensidad del rechinar y apretar los dientes, reduciendo así la cantidad de señales que se envían de vuelta al sistema nervioso trigémino. El dispositivo clínicamente más eficaz que puede hacer esto es SCi.


Desgaste dental y dientes rotos

Sus dientes deberían durar toda la vida y no desgastarse. Sin embargo, el bruxismo es una condición destructiva. Masticar y comer normalmente no causa desgaste o daño a los dientes. Si sufres de bruxismo, estás ejerciendo presión sobre tus dientes y encías. Durante el sueño, no existe un mecanismo de retroalimentación para decirle a su cerebro que le duelen los dientes debido a demasiada presión, por lo tanto, podemos poner hasta 40 veces más presión sobre nuestros dientes mientras dormimos; no es sorprendente ver mucho de daños.

El signo más común de bruxismo son los dientes frontales acortados (desgaste incisal). Sin embargo, en casos más severos, vemos signos de grietas en el esmalte, abfracciones (pérdida del esmalte a nivel de las encías), recesión de las encías, sobrecrecimiento óseo ( exostosis ósea ), cúspides rotas de los dientes molares y daños a las restauraciones (coronas y puentes).

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