¿POR QUÉ INICIAR UN TRATAMIENTO DE ORTOPEDIA NEUROMUSCULAR A TEMPRANA EDAD?

La Asociación Americana de Ortodoncistas recomienda que se evalúe a tu hijo antes de los 5 años. Puede pensar, ¡qué temprano! ¿Por qué antes de los 5 años? Bueno hay algunas razones para ello.

 

Todos los dientes de leche o deciduos ya están erupcionados, en esta condición ya podemos verificar la mordida y evaluar cualquier mordida cruzada. Idealmente, todos los dientes superiores deben estar delante o fuera de los dientes inferiores. Si este no es el caso, entonces el tratamiento recomendado es la ortopedia neuromuscular para corregir la mordida a través del redireccionamiento del crecimiento de los huesos maxilares y así evitar futuras asimetrías faciales.   

 

Hay hábitos, como chuparse el dedo, que pueden ser perjudiciales para las mandíbulas en desarrollo. Los hábitos pueden afectar negativamente la erupción dental permanente, restringir el desarrollo de la mandíbula llevándola hacia atrás, evitar que los dientes frontales se toquen, aumentar el tercio inferior de la cara haciéndola lucir más alargada, perdiendo las proporciones faciales recomendadas. 

 
A veces un niño puede estar respirando por la boca inconcientemente, lo que lleva a un desarrollo inadecuado del rostro. La presencia de ojeras,  ojos caídos o una expresión o tristeza, labios resecos y entreabiertos todo el tiempo, mentón pequeño y hacia atrás, perfil convexo y dientes sobresalidos, son algunas características de ello.

Los tratamientos de ortopedia neuromuscular en niños pequeños no son invasivos y son fijos, dentro de ellos la Dra. Yvonne Orbegozo prefiere las Pistas Planas Directas, que son bloques de resina colocados sobre los dientes de leche que modifican la mordida, ayudan a que los dientes permanentes se ubiquen en buena posición y permiten un desarrollo facial adecuado

A pesar de que la mayoría de los niños menores de 5 años necesitan tratamiento temprano, no siempre sus padres están enterados de los beneficios significativos de la ortopedia neuromuscular. Es por ello que recomendamos una evaluación oportuna antes de los 5 años para proporcionar un tratamiento adecuado o tranquilidad e información necesaria para los padres de niños que no lo necesitan.